La secretaria de Estado estadounidense, Hillary Clinton, y el Defensa, Robert Gates, se reunían hoy con el gobierno mexicano para estudiar la guerra contra el narcotráfico diez días después del asesinato de una funcionaria consular estadounidense en Ciudad Juárez.
"Este es uno de los más formidables equipos que hayamos traído a cualquier reunión en el extranjero durante este gobierno" lo que subraya "la prioridad" que el presidente Barack Obama le otorga "a nuestra relación con México", expresó Clinton en las palabras de apertura de la reunión.
La delegación estadounidense que permanecerá en la jornada en la capital mexicana está integrada también por la secretaria de Seguridad Interna, Janet Napolitano, y numerosos funcionarios en las áreas de inteligencia, seguridad y lucha antidrogas.
El encuentro se realiza diez días después de los asesinatos de tres personas del consulado estadounidense en la fronteriza Ciudad Juárez, una funcionaria, su marido y el de una colega, y tenía como escenario la torre en la que funciona la cancillería, frente al céntrico parque de la Alameda, en medio de fuertes medidas de seguridad. La violencia de los carteles es responsable de 15.000 homicidios en los últimos tres años, sobre todo en la región fronteriza con Estados Unidos.
Clinton destaca importancia del Plan Mérida
"Estados Unidos y México disfrutan de una de las relaciones bilaterales más cercanas entre dos países del mundo", afirmó la secretaria de Estado, quien tras culminar la reunión esta tarde se entrevistará con el presidente Felipe Calderón, antes de retornar a Washington.
Mérida, que inició como un plan para canalizar material para la lucha antidrogas, debe volverse una estrategia más integral con fomento socioeconómico y de los cuerpos de seguridad civiles, señalaron hoy a periodistas altos funcionarios del gobierno estadounidense. Esta reunión se centrará en ver cómo puede ser el "marco de ese esfuerzo continuado", dijeron los funcionarios.
Obama desea trabajar en ambos lados de la frontera
Para subrayar la importancia de la relación de Washington con México, el presidente Barack Obama llamó por teléfono anoche a Calderón, a quien le expresó su deseo de trabajar por la seguridad en ambos lados de la frontera, según un comunicado de la Casa Blanca. Obama, quien viajó a México en agosto pasado, dejó clara la corresponsabilidad de su país, primer consumidor mundial de narcóticos, en la lucha antidrogas. Calderón le devolverá la visita en mayo.
La secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, durante el vuelo que llevó a parte de la comitiva a México, defendió la estrategia de Calderón, unos días después de haber criticado la movilización del ejército -unos 50.000 militares- en la lucha contra los carteles. No obstante, precisó que la fuerza militar debe complementarse con "fuerzas de seguridad civiles y el tradicional marco" de la justicia civil. Dijo que Estados Unidos desea compartir experiencias como las de Nueva York y Los Angeles, donde políticas públicas lograron disminuir en gran medida la violencia, para poblaciones violentas como Ciudad Juárez.
Además, en su lado de la frontera, Estados Unidos ha incrementado la presencia de agentes y la tecnología para detener el flujo de armas hacia México. El 90% de las armas incautadas a los carteles proviene de Estados Unidos. (AFP)
No hay comentarios:
Publicar un comentario